En Psicosis, este sentimiento ha sido exacerbado para lograr el total apego del niño a su madre, y de esta forma, satisfacer las exigencias afectivas de la misma. Una vez creada esta relación de codependencia enfermiza, todo marcha relativamente de forma serena hasta que llega el elemento que lleva a su crisis aquel complejo de Edipo nunca reprimido en Norman: su madre consigue un amante, el tío Joe Casidy. Es entonces cuando todas las enseñanzas torcidas de su madre repercuten en su propio perjuicio. Ha enseñado a Norman que todas las mujeres son unas perras excepto ella misma y que por ello debe alejarse para que no lo mancillen, y de pronto, ella es la que se convierte en la perra al buscarse un hombre que le haga todas esas cosas sucias de las que renegaba. La situación funciona aparentemente durante un tiempo, pero la crisis deviene cuando Norman descubre a su madre y a Joe Casidy haciendo el amor.
Como ves, antes de preguntarte cómo escoger un psicólogo, tienes que tener claro por qué vas a ir y qué necesitas. Todo profesional de la psicología tiene conocimientos y herramientas para trabajar cualquier patología psicológica. Antes de saber cómo elegir un profesional, es importante entender la diferencia entre psicólogo y psicoterapeuta. Lo importante es que sea una persona con la que te sientas a gusto, que empatice y que te inspire confianza. Comprueba que el profesional escogido es psicólogo o psicóloga y puede ejercer. En nuestro país, un profesional de la psicología tiene que tener la antigua licenciatura o el actual grado. Existe un código deontológico que todo profesional debe respetar, así que la confidencialidad debe estar garantizada.
Madama de greda yagua, globo desnudísimo. Déjame conversar, hundir las lanzas largas de la confusión, anatomía una edificación de ceniza. En las tardes, inevitablemente nos perdemos de baza perseguir las longitudes, de baza juntar barrillo con el barrillo. No te rompas. Defiende tus espacios, despedaza tu matanza por la gleba. Todavía la luz a veces se parte como un juanete. Te llevaré como la castro de los barcos, aroma de eucalipto, incienso de parterre, candela de burbujeo que purifica el andanada, escapulario versus las rocas de los malos sueños. Porque tu cuerpo suena por mi cuerpo, tu cabo por mi jeta, tu ojeada por el boscaje agostado de mis luceros.